Los influencers que han llorado ante las cámaras

Hoy en día es tomado como 'normal' el trabajo de influencer de las redes sociales, y es que ya sea creando contenido a través de YouTube, TikTok o Instagram, muchos han sido los jóvenes que han ganado fama rapidamente. 

 

Lamentablemente, así de rápido como llega el éxito, rápido se va y han sido varios los que han desistido de convertirse en influencers debido al acecho que viven a diario por culpa de los haters. 

 

Muchos de ellos han decidido compartir su momento más vulnerable y han demostrado que son sólo humanos dejando ver sus lágrimas en medio de una confesión. 

 

Como la ocurrido con la YouTuber, Dhasia Wezka, quien se dedica hacer contenido de moda y belleza, y que hace unas semanas compartió con sus seguidores que vivió un momento de deseperación y temor, debido a que un hombre la persiguió en la calle. Se encerró en casa y entre lágrimas relato los hechos en redes sociales. 

 

 

Otro caso reciente es del TikToker, Papi Kunno, que se vio en medio de la polémica luego de anunciar que se unió a una plataforma de saludos personalizados, por lo que los haters lo señalaron de oportunista. A través de un video anunció que se retiraría de las redes sociales, alegando que nunca fue su intención crear un personaje en internet y que siempre fue él mismo. 

 

 

Otro caso sonado fue el triángulo de declaraciones que se armó entre Lizbeth Rodríguez, Kimberly Loaiza y Juan de Dios Pantoja. La 'chica badabum' acusó a JD Pantoja de serle infiel a su esposa, Kimberly, con otro youtuber. A través de redes sociales publicó un video en el que pedía disculpas por lo dicho y aprovechó para hablar de Kenia OS, otra influencer a la que cuestionó en el pasado. 

 

 

En TikTok, la influencer Jimena Jiménez derramó las lágrimas al recordar que de niña sufría de bullying y ahora, no puede creer que exista mucha gente que la siga en sus redes sociales, lo que hace sentir querida. 

 

 

El YouTuber Antrax apareció llorando en sus stories de Instagram, luego de que se enteró que uno de sus segudiores, de nombre Fernando, falleció a causa del cáncer y su último deseo era poder conocerlo, pero no se pudo concretar.