La
seguridad en los
estadios sigue dando de qué hablar en
Brasil. En el encuentro entre
Sao Paolo y Gremio, un joven
cayó desde el
tercer nivel del graderio del
Estadio Morumbí, siendo captado por una
cámara de televisión en lo que quedó como una terrorífica imagen.
Iago Melo Ríos, de 23 años, cayó de forma espeluznante después de estar brincando en apoyo a su equipo.
El joven sobrevivió a la caída, aunque lesionó a una pequeña de 13 años, Giovana Santos Araujo.
Tras el incidente, el cuerpo médico del inmueble no tardó en acudir a auxiliar a los lesionados, quienes fueron llevados a un hospital, para más tarde ser diagnosticados como fuera de peligro.
El equipo Sao Paolo respondió a los hechos y se responsabilizó al respecto.
"Sao Paulo informa que Iago de Melo Ríos y Giovana Santos Araújo abandonaron el Estadio Morumbí conscientes, después de la primera atención médica que se le brindó, para que se les realicen pruebas en hospitales de la región. El club proporcionará la asistencia necesaria a ambos", informó el club en un comunicado.
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