La canciller de Alemania, Angela Merkel causó mucha preocupación en un acto público con el presidente de Ucrania, pues la mandataria se e vio tener temblores anormales en todo su cuerpo, sin que ella pudiera controlarlos.
Un día después, Merkel dijo sentirse bien y aunque no especificó qué fue lo que realmente pasó, muchos especulan que la canciller sufre de algún mal que le está afectando el sistema nervioso.
En una conferencia de prensa una hora más tarde, Merkel dijo que estaba deshidratada y que había mejorado tras “al menos tres vasos de agua”.
Aquí el dramático momento:
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