Tras ser dada de alta, hace un par de años, por vencer el cáncer de lengua y haberse quedado sin habla, Úrsula Prats ha recuperado su voz.
En el 2011 le fue diagnosticada esta enfermedad, y se sometió a radioterapias que le afectaron diversas partes de la boca, entre ellas, los dientes, incluso le tuvieron que quitar la quijada: "La cirugía fue por el cuello, para no tocarme la cara, me movieron la quijada, me operaron y me la volvieron a poner", reveló a un medio de comunicación.
Sin embargo, después de haberse sometido a terapias dentales y de lenguaje, la actriz de 55 años, ya puede hablar: "No estoy impedida para hacerlo, ya estoy dada de alta gracias a Dios. Ya daré una conferencia de prensa", contó.
Además confesó que nunca tuvo miedo de su enfermedad y contrario a eso, la enfrentó y ahora se está recuperando exitosamente, incluso pretende regresar pronto a la televisión: "Me tuve que recuperar más bien de la radiación, pero estoy yendo para arriba".
A pesar de los altibajos, Úrsula, nunca bajó la guardia. El amor a la vida, a su trabajo y a ella misma, la hizo seguir adelante, y ahora más motivada que nunca piensa hacer un libro donde relatará su lucha contra el cáncer, así como momentos importantes de su vida.
AMM
En el 2011 le fue diagnosticada esta enfermedad, y se sometió a radioterapias que le afectaron diversas partes de la boca, entre ellas, los dientes, incluso le tuvieron que quitar la quijada: "La cirugía fue por el cuello, para no tocarme la cara, me movieron la quijada, me operaron y me la volvieron a poner", reveló a un medio de comunicación.
Sin embargo, después de haberse sometido a terapias dentales y de lenguaje, la actriz de 55 años, ya puede hablar: "No estoy impedida para hacerlo, ya estoy dada de alta gracias a Dios. Ya daré una conferencia de prensa", contó.
Además confesó que nunca tuvo miedo de su enfermedad y contrario a eso, la enfrentó y ahora se está recuperando exitosamente, incluso pretende regresar pronto a la televisión: "Me tuve que recuperar más bien de la radiación, pero estoy yendo para arriba".
A pesar de los altibajos, Úrsula, nunca bajó la guardia. El amor a la vida, a su trabajo y a ella misma, la hizo seguir adelante, y ahora más motivada que nunca piensa hacer un libro donde relatará su lucha contra el cáncer, así como momentos importantes de su vida.
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