Enrique Guzmán revela que no tiene ganas de cantar y sus conciertos se cancelaron

El cantante perteneciente a la dinastía Guzmán-Pinal, Enrique Guzmán dio a conocer que a partir de la polémica originada por las acusaciones de Frida Sofía, en las que asegura que él abusó sexualmente de ella cuando tenía cinco años, sus conciertos se han cancelado y que no tiene cara para salir ante un público, pues ya tampoco tiene ganas de cantar.

 

En una entrevista para el matutino ‘Hoy’, el cantante de 78 años de edad confesó que varios de los conciertos que tenía programados vía streaming se han cancelado por la mala imagen pública que han generado las acusaciones de su nieta, lo que ha repercutido en su estado anímico.

 

"Tenía algunos conciertos en línea y se han cancelado todos porque con qué cara voy a salir a decir algo, qué les voy a cantar, con qué sonrisa puede hablar el payasito, el payasito está triste, no tiene ganas de cantar", comentó.

 

 

 

Además, el rockero reiteró que él nunca le ha faltado el respeto a Frida Sofía y que el haberla tocado, es algo que jamás haría. "En algo me equivoqué, pero yo faltarle a ella, no lo he hecho nunca".

 

Enrique Guzmán también reveló que su hija, Alejandra ha sido un constante apoyo para él y que inclusive ella sabe cuál ha sido el nivel de amor y cercanía que tiene con sus nietos, a quienes quiere, pero la edad le impide seguirles el paso.

 

“Ale sabe en qué nivel ha sido mi amistad con mis nietos en general, soy de esos que te consiento, pero que 'ya es hora de que te vayas a tu casa'... no soy muy niñero, cuando mis nietos tienen ganas de divertirse me dan ganas de echarme un sueñito”, dijo.

 

 

 

 

“Lo terrible es que no sepa yo pa dónde hacerme, eso es lo único que me ha preocupado. Alejandra me dijo 'haz lo que te parezca' y lo que me parezca es tratar de ayudarla de todas maneras. ¿cómo?, no tengo idea", añadió.

 

Cabe destacar que durante la entrevista, Enrique Guzmán también confesó que espera, en un futuro cercano, que Frida Sofía se disculpe con él y acepte que se equivocó, y consideró que lo que necesita su nieta es ayuda de un profesional en el campo de la salud mental.

 

“Espero que alguna vez me diga ‘abu, y perdóname, algo hice mal’, o en algo la regué o en algo me orillaron, o me equivoqué, porque yo faltarle a ella no lo he hecho nunca”, finalizó.