Recomendaciones del Dr Abel para mitigar el zumbido en los oídos

Un padecimiento que sobreestimula el oído y lo hace percibir de manera continuada y recurrente, ruidos y zumbidos.

 

*Hipersensibilidad a todo tipo de sonidos.

*Irritabilidad.

*Dolor mandibular.

*Dolor en la columna cervical.

*Dificultad para concentrarse.

 

 

PREGUNTA: Doctor: desde hace cuatro años escucho zumbidos; al principio estos sonidos eran intermitentes, pero poco a poco se fueron haciendo más constantes y prolongados, al grado de que me impedían dormir bien. Me han hecho muchos estudios y desgraciadamente no me han encontrado nada. Hace poco fui con un doctor, quien al principio creyó que mi padecimiento era causado por mis nervios, pero al contarle que escuchaba zumbidos, me dijo que lo que tengo es acúfenos. Hasta ahora nada me ha funcionado y me encuentro desesperada porque no duermo bien, amanezco cansada, adolorida y de malas... ¡Ayúdeme!

 

RESPUESTA: los acúfenos es una percepción continuada o recurrente de un ruido o sonido sin que haya un estímulo acústico externo, que puede ser subjetiva (mental) u objetiva (por una causa física). Los ruidos pueden ser como campanitas, zumbidos o como el flujo de electricidad, y las causas varían de una persona a otra. Puede detonarse si hay lesiones en el conducto auditivo, en el oído medio o en el oído interno, e incluso lesiones a nivel cerebral como meningitis, tumor cerebral, esclerosis múltiple y muchas otras. También puede llegar a presentarse en situaciones de estrés.

 

 

 

Ingredientes: 1 cda. de cola de caballo, 1 cda. de toronjil, 1 cda. de ginkgo biloba, 1 cda. de avena, 1 cda. de hierba de San Juan, 1 litro de agua.

Preparación: Hierve por 10 minutos, cuela y toma como agua de tiempo, durante un mes.

 

Ingredientes: 1/2 plátano, 2 maracuyá, 1/2 naranja, en gajos, 3 almendras, 1 vaso de agua.

Preparación: Licua los ingredientes y bébelo diariamente, cinco días por semana, durante dos meses.

 

Es importantísimo que estés atenta a las variantes de este padecimiento y consúltalo con tu médico.

 

 

 

*Ten a un otorrinolaringólogo de cabecera. Te ayudará a evitar complicaciones. También puedes comprar tapones o audífonos bloqueadores de sonidos externos.