Un día les dijimos que ya no
podían ir a la escuela y que
aprenderían en casa, y no
dudaron que era lo mejor.
Les dijimos que no
podrían ver a sus amigos
y se conformaron con
verlos en una pantalla.
Les dijimos que no podían
ir al parque, ni jugar en la
calle y nos creyeron.
Les dijimos que no podían
abrazar a sus abuelos y
transformaron sus
besos en dibujos.
Les dijimos que al
"enemigo" se le vence
lavándose las manos
y se convirtieron
en expertos.
Les dijimos que los
nuevos superhéroes
usan batas y los
apoyaron como nadie.
Ellos nos muestran
una capacidad de
adaptación enorme...
y nunca se cansan de
darnos amor.
¡Ellos son nuestros campeones!
Un día les dijimos que ya no
podían ir a la escuela y que
aprenderían en casa, y no
dudaron que era lo mejor.
Les dijimos que no
podrían ver a sus amigos
y se conformaron con
verlos en una pantalla.
Les dijimos que no podían
ir al parque, ni jugar en la
calle y nos creyeron.
Les dijimos que no podían
abrazar a sus abuelos y
transformaron sus
besos en dibujos.
Les dijimos que al
"enemigo" se le vence
lavándose las manos
y se convirtieron
en expertos.
Les dijimos que los
nuevos superhéroes
usan batas y los
apoyaron como nadie.
Ellos nos muestran
una capacidad de
adaptación enorme...
y nunca se cansan de
darnos amor.
¡Ellos son nuestros campeones!